porque tú eres mi esperanza; oh Señor DIOS, tú eres mi confianza desde mi juventud.
De ti he recibido apoyo desde mi nacimiento; tú eres el que me sacó del seno de mi madre; para ti es continuamente mi alabanza.
He llegado a ser el asombro de muchos, porque tú eres mi refugio fuerte.
Llena está mi boca de tu alabanza y de tu gloria todo el día.
Salmo 71:5-8.