Porque no para siempre será olvidado el menesteroso,
Ni la esperanza de los pobres perecerá perpetuamente.
Levántate, oh Jehová; no se fortalezca el hombre;
Sean juzgadas las naciones delante de ti.
Pon, oh Jehová, temor en ellos;
Conozcan las naciones que no son sino hombres.
Salmo 9:18-20.