Pastor Cash Luna – Atribulados, pero no angustiados
En medio de las dificultades, aprendamos a diferenciar lo externo de lo interno. Claro que podríamos estar atribulados, en apuros, perseguidos y derribados, todo eso es externo, es lo que el mundo podría hacernos sentir.
Sin embargo, nuestra fe en la victoria que ya tenemos provoca que, a pesar de todo eso negativo, no estemos angustiados, desesperados, desamparados ni destruidos.
Sal 103:1 Salmo de David. Bendice, alma mía, al SEÑOR, y bendiga todo mi ser su santo nombre.
Sal 103:2 Bendice, alma mía, al SEÑOR, y no olvides ninguno de sus beneficios.
Sal 103:3 El es el que perdona todas tus iniquidades, el que sana todas tus enfermedades;
Sal 103:4 el que rescata de la fosa tu vida, el que te corona de bondad y compasión;
Sal 103:5 el que colma de bienes tus años, para que tu juventud se renueve como el águila.
