En Dios solamente espera en silencio mi alma;
de El viene mi salvación.
Sólo El es mi roca y mi salvación,
mi baluarte, nunca seré sacudido.
Salmo 62:1-2.
En Dios solamente espera en silencio mi alma;
de El viene mi salvación.
Sólo El es mi roca y mi salvación,
mi baluarte, nunca seré sacudido.
Salmo 62:1-2.