Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación; que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación. Asà que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios. 2 Corintios 5:18-20.
https://www.youtube.com/watch?v=6XaUnmcmhx4?list=PL148FACE277D7EF7A&hl=es_ES» frameborder=»0″ allowfullscreen>