Majo Solis – Conferencia de Mujeres Radiante 2017
1Sa 1:3 Este hombre subía todos los años de su ciudad para adorar y ofrecer sacrificio al SEÑOR de los ejércitos en Silo. Y los dos hijos de Elí, Ofni y Finees, eran sacerdotes del SEÑOR allí.
1Sa 1:4 Cuando llegaba el día en que Elcana ofrecía sacrificio, daba porciones a Penina su mujer y a todos sus hijos e hijas;
1Sa 1:5 pero a Ana le daba una doble porción, pues él amaba a Ana, aunque el SEÑOR no le había dado hijos.
1Sa 1:6 Y su rival la provocaba amargamente para irritarla, porque el SEÑOR no le había dado hijos.
1Sa 1:7 Esto sucedía año tras año; siempre que ella subía a la casa del SEÑOR, la otra la provocaba. Y Ana lloraba y no comía.
1Sa 1:8 Entonces Elcana su marido le dijo: Ana, ¿por qué lloras y no comes? ¿Por qué está triste tu corazón? ¿No soy yo para ti mejor que diez hijos?
1Sa 1:9 Pero Ana se levantó después de haber comido y bebido en Silo, y mientras el sacerdote Elí estaba sentado en la silla junto al poste de la puerta del templo del SEÑOR,
1Sa 1:10 ella, muy angustiada, oraba al SEÑOR y lloraba amargamente.
1Sa 1:11 E hizo voto y dijo: Oh SEÑOR de los ejércitos, si tú te dignas mirar la aflicción de tu sierva, te acuerdas de mí y no te olvidas de tu sierva, sino que das un hijo a tu sierva, yo lo dedicaré al SEÑOR por todos los días de su vida y nunca pasará navaja sobre su cabeza.
1Sa 1:12 Y mientras ella continuaba en oración delante del SEÑOR, Elí le estaba observando la boca.
1Sa 1:13 Pero Ana hablaba en su corazón, sólo sus labios se movían y su voz no se oía. Elí, pues, pensó que estaba ebria.
1Sa 1:14 Entonces Elí le dijo: ¿Hasta cuándo estarás embriagada? Echa de ti tu vino.
1Sa 1:15 Pero Ana respondió y dijo: No, señor mío, soy una mujer angustiada en espíritu; no he bebido vino ni licor, sino que he derramado mi alma delante del SEÑOR.
1Sa 1:16 No tengas a tu sierva por mujer indigna; porque hasta ahora he orado a causa de mi gran congoja y aflicción.
1Sa 1:17 Respondió Elí y dijo: Ve en paz; y que el Dios de Israel te conceda la petición que le has hecho.
1Sa 1:18 Y ella dijo: Halle tu sierva gracia ante tus ojos. Y la mujer se puso en camino, comió y ya no estaba triste su semblante.
1Sa 1:19 Y se levantaron de mañana, adoraron delante del SEÑOR y regresaron de nuevo a su casa en Ramá. Y Elcana se llegó a Ana su mujer, y el SEÑOR se acordó de ella.
1Sa 1:20 Y a su debido tiempo, después de haber concebido, Ana dio a luz un hijo, y le puso por nombre Samuel, diciendo: Porque se lo he pedido al SEÑOR.