Pero tu, ¿por que juzgas a tu hermano? O tu tambien, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo. Porque escrito está: Vivo yo, dice el Señor, que ante mi se doblara toda rodilla, Y toda lengua confesara a Dios. De manera que cada uno de nosotros dara a Dios cuenta de si. Así que, ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano.
Romanos 14:10-13.
