Dante Gebel – Oportunidades

Nuestro destino es determinado por las oportunidades que aprovechamos o dejamos pasar; por esas puertas que Dios abre cuando siembra en nuestro corazón la semilla de un sueño, de una visión ó de un llamado al ministerio. Mientras tengamos vida, el Señor nos va a presentar oportunidades… lo importante es estar calibrados con el Espíritu Santo para identificarlas, pues algunas son tan pequeñas como semillas de mostaza o vienen disfrazadas de problemas. Siembra tus semillas y no descanses hasta cosechar. No busques más excusas, aprovecha tus oportunidades porque mañana saldrá el sol y no sabes lo que puede traerte la marea. – Dante Gebel – Oportunidades.

YouTube player

Descubre más desde Tus Videos Cristianos - Musica Cristiana, Devocionales, Predicas

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Otras Recomendaciones

Post navigation

Jesus Culture – Fresh Outpouring (Live) ft. Kim Walker-Smith

Jesus Culture, Official live worship video of Fresh Outpouring featuring Kim Walker-Smith from Jesus Culture’s new album, Love Has A Name. Renew us in this day Just like You said...

Prisma – Gravedad

Prisma – Gravedad Letra: VERSO 1 Me salvaste tu hijo soy Confiado me acerco a ti mi Dios El Creador que me formó Ya nada me falta completo estoy Por...

Dante Gebel – Hasta que llueva

Es fácil abandonar los sueños y las promesas. A veces lo hacemos porque no estamos mirando al lugar correcto; otras porque nos desesperamos al no obtener pronta respuesta y dejamos...

Caricaturas, antes y ahora – AndyVlog

caricaturas cartoons antes ahora diadelseñor Los niños pasan un promedio de 1500 horas al año frente a la television. Mientras que solo pasan 900 horas dentro de un salon de...

No dejes de creer – Horizonte Ensenada

No dejes de creer Mar 7:24 Levantándose de allí, se fue a la región de Tiro, y entrando en una casa, no quería que nadie lo supiera, pero no pudo...

Delicias a tu diestra – Jaime Murrel – musicacristiana

Por tanto, mi corazón se alegra y mi alma se regocija; también mi carne morará segura, pues tú no abandonarás mi alma en el Seol, ni permitirás a tu Santo...