No es tiempo de llorar – Diana Tapias
¿Qué es lo primero que hacemos cuando nos ataca el enemigo? ¿A quién gritamos? ¿En dónde buscamos ayuda?
¿Levantamos nuestra voz a Dios? ¿Recurrimos en oración clamando por Su ayuda?
Dios nunca prometió que no tendríamos batallas pero sí prometió estar siempre con nosotros; Estas batallas tienen como objetivo entrenarnos, despertarnos, volvernos aguerridos, valientes, fuertes.